8 puntos clave para elegir un centro de reproducción asistida

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¿Cómo elegir un centro de reproducción asistida? Es una pregunta realmente difícil de contestar, seguramente, tu ginecólogo te recomendará alguno de su confianza. No obstante, si me lo permites, te aconsejo que tengas en cuenta los siguientes puntos:

  1. El boca a boca

Siempre se ha dicho que el boca a boca, es decir la experiencia que te comentan otros, es lo que realmente hace que uno se decida por una cosa u otra. No digamos con la aparición de las redes sociales y toda la información que circula en la web. Pero, ten mucha cautela con todo lo que leas. Un primer paso será analizar la información que te  llegue y visitar todas las webs de los centros de reproducción cercanos.

  1. ¿Es un centro conocido?

El centro ha de estar reconocido oficialmente, homologado.

¡Ojo en este punto! No os aconsejo acudir a foros, muchas veces están manipulados y no pocas veces cargados de malas intenciones para desprestigiar a la competencia. La Sociedad Española de Fertilidad (SEF) en su página web tiene una zona para pacientes donde puedes obtener información sobre qué centros hay en España y su localización, así como gracias al Registro saber cuáles son los resultados de cada uno de ellos. Hasta ahora el Registro lo habían realizado algunos centros de forma voluntaria, pero desde el Registro 2014  es obligatorio.

  1. En manos de buenos especialistas

Es fundamental, buscar un centro con especialistas y profesionales con una sólida formación y experiencia, como ya te comenté en el post “La evolución del equipo de reproducción asistida”. Ellos podrán atenderte, estudiar tus  circunstancias y ofrecerte el tratamiento más adecuado para ti o tú pareja, un trato individualizado. Es importante que siempre muestren respeto por vuestros valores y preferencias ante los distintos tratamientos posibles, no debéis sentiros presionados. En caso de no sentiros cómodos en esta primera visita al centro, es preferible consultar en otro.

  1. Trato cercano y personal

Las personas que acuden a un centro de reproducción asistida están sometidas a una tormenta de emociones que van de la ilusión y esperanza a la desconfianza, ansiedad o desilusión. Es necesario que observéis si en el centro el trato es  cálido, cercano, que os permita relajaros, sentiros acompañados y comprendidos. Tranquiliza mucho saber que son accesibles, por ejemplo que existe un teléfono de contacto 24h, pero eso sí, para usarlo en momentos realmente de urgencia cuando el centro no esté abierto. Además, es muy positivo si el centro cuenta con página web con zonas para interactuar con pacientes, grupos de autoayuda u otros espacios que permitan expresar vuestras dudas. De este modo, os sentiréis más reconfortados y seguros en cada paso que deis.

  1. Información clara, veraz y por escrito. 

Es fundamental que todos los pasos a seguir sean descritos detalladamente por el/ los especialista/s, que utilicen un lenguaje comprensible y resuelvan cuantas dudas  puedan surgir. Así como las probabilidades de éxito en casos semejantes al vuestro, a ser posible que estén contrastados. Y siempre es importante pedir que te den por escrito todas las indicaciones que tengas que seguir, a fin de evitar malos entendidos.

Igualmente, es muy útil conocer los presupuestos de forma inmediata, gratuita, si existe algún tipo de financiación, algunos centros cuentan con sistemas de crédito, y disponer de un tiempo de validez. No son tratamientos económicos precisamente, además pueden variar considerablemente de un centro a otro. Además, al importe del tratamiento hay que añadirle otros gastos como la medicación, traslados, alojamiento y alimentación si no se habita en la misma ciudad en la que se encuentra el centro, etc. En este punto es importante  valorar si es necesario incrementar los costes buscando la excelencia en un centro a cientos de kilómetros o acudir a un centro con buenos resultados en la propia ciudad.

  1. El Consentimiento informado

Antes de llevar a cabo cualquier técnica es preciso rellenar un documento con los datos personales, leer y comprender en qué consiste el proceso determinado, sus riesgos y porcentajes de éxito. Este documento se llama consentimiento informado. Así bien, recuerda que  hay que firmar un consentimiento por cada proceso (inseminación conyugal o si es de donante, FIV/ICSI, congelación de embriones, etc.) y no sólo hay que leerlo, sino también es fundamental entenderlo y ser veraces con los datos que se aportan. En el caso de que surjan dudas, estáis en vuestro pleno derecho para solicitar que se os aclaren. ¡Tomaros vuestro tiempo! Y por supuesto, es muy importante que estos documentos no los perdáis.

  1. Equipamiento adecuado

Puede ser que vuestro caso no requiera de un tratamiento complejo, pero en caso de que fuese así, es obvio que el centro ha de estar equipado correctamente. Ha de poder ofrecer toda la tecnología e innovación disponible para poder llevar a cabo los tratamientos. No obstante, si carece de la última tecnología de vanguardia, que acabas de ver en la TV por ejemplo, no significa que no vayas a conseguir el tan ansiado embarazo. Seamos cautos, no toda la información que nos llega de los medios de comunicación está disponible en el mercado o se ha demostrado de forma concluyente que sea imprescindible.

  1. Exigir certificados  de calidad

Un centro que está sometido a estrictos controles de calidad internos y externos, así como la formación continua de sus profesionales, es un centro que garantiza la calidad, no sólo en sus resultados sino en la satisfacción de sus pacientes. La mayoría de los laboratorios de reproducción asistida en todo el territorio nacional han incorporado sistemas de gestión de calidad según los requerimientos de la Norma internacional UNE-EN ISO 9001. Además, se ha creado una norma española específica sobre sistemas de gestión de la calidad para los laboratorios de reproducción asistida la Norma UNE 179007.  Busca un centro de calidad reconocida.

Evidentemente hay muchos factores que os pueden hacer decidiros por un centro u otro, como puede ser la atención recibida desde que entráis en el centro, la limpieza, qué impresión os causan los especialistas, certificados de calidad, etc. Como siempre, os recomiendo buscar información de fuentes fiables, valorar los pros y contras de cada opción que se os presente. Tenéis que sentiros ilusionados y decididos a dar este gran paso y sobre todo depositar vuestra confianza en el equipo biomédico que habéis elegido.

Victoria

Material gráfico diseñado por Freepick

El virus Zika y la fertilidad: 3 escenarios posibles

Seguro que has escuchado hablar del virus Zika transmitido por un mosquito en Brasil y su devastadora acción sobre algunos niños nacidos de mujeres que han sufrido la enfermedad durante el embarazo, estos niños afectados por el virus presentan microcefalia.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha declarado una alerta de emergencia sanitaria global sobre este virus para informar a la población y orientar a los profesionales, ya que poco se conoce sobre él.

Para saber a ciencia cierta si una persona está infectada por el virus del Zika se requiere una prueba diagnóstica en sangre, orina, saliva u otros líquidos corporales. Actualmente no hay vacunas, aunque ya se está trabajando en ello. De hecho, Brasil y EE.UU. han firmado un acuerdo para desarrollar una vacuna que dé solución a este problema. Tampoco existen tratamientos específicos para esta enfermedad. La mejor forma de prevenirla consiste en la protección frente a las picaduras de los mosquitos.  Y cómo no, evitar ir a las zonas de contagio como son África, Caribe, Centroamérica, Suramérica, Asia y el Pacífico Sur.

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Este virus ha alertado a sociedades científicas del ámbito de la Fertilidad, Obstetricia y Ginecología por sus consecuencias en los hijos de las madres afectadas y de la posibilidad de supervivencia del virus en el semen del varón durante un periodo prolongado de tiempo.

A continuación, veremos tres escenarios posibles en los que el virus puede retrasar el deseo de ser padres.

  • Querer tener un hijo tras una estancia en las zonas afectadas

Tu ginecólogo o en el centro de fertilidad te van a dar la información que necesitas. Básicamente, os van a preguntar sobre la posibilidad de haber estado en alguna de las zonas de contagio en el último mes o si tu pareja, o persona con la que hayas mantenido relaciones sexuales lo ha estado. Hay que tener en cuenta que se transmite a través del mismo insecto, pero se han detectado casos de transmisión sexual.

  • Durante el embarazo

Según la OMS, durante el periodo de gestación se recomienda evitar viajar a países infectados. En el caso de que no hubiese más remedio, habrá que mantener a raya la presencia de mosquitos mediante el uso de repelentes específicos para embarazadas (DEET –Dietiltoluamida-, picaridin o IR3535), ropa clara y de manga larga y evitar estar en zonas húmedas. En definitiva, mantener unos buenos hábitos de higiene, usar preservativo si mantenemos relaciones sexuales con personas que han estado en zonas infectadas.  Y siempre seguir las pautas que te indique tu ginecólogo.

  • Donación de gametos (óvulos y espermatozoides)

Dado que el virus Zika permanece en el semen bastante tiempo no se puede descartar que en espermatozoides y óvulos también persista. Por esta razón, la Asociación para el Estudio de la Biología de la Reproducción (ASEBIR) recomienda a todos los centros de reproducción asistida que incluyan en sus cuestionarios de admisión de donantes y protocolos de trabajo algunas preguntas como: si ha viajado recientemente a una zona afectada, si manifiesta síntomas de la enfermedad o ha mantenido relaciones sexuales con alguna persona que haya estado en dicha zona.

La Sociedad Española de Obstetricia y Ginecología (SEGO), Sociedad Española de Fertilidad (SEF), la Asociación para el Estudio de la Biología de Reproducción (ASEBIR), entre otras, han hecho sus respectivos comunicados haciendo una llamada a la prudencia y orientando sobre la conveniencia de posponer el inicio de tratamientos de fertilidad o donación hasta no haber pasado un tiempo prudencial de 28 días, en el caso de que se haya estado en zonas de contagio, para descartar que no tiene la enfermedad.

Si te encuentras en alguno de estos tres escenarios, no dudes en consultar todas las cuestiones que tengas con tu especialista. Él sabrá orientarte de la mejor manera posible, pero no olvides que no hay mejor prevención que el sentido común.

Victoria

¿Es lo mismo la esterilidad que la infertilidad?

Para comenzar esta andadura partiremos de una cuestión: ¿es lo mismo la esterilidad que la infertilidad? Son dos conceptos que se usan habitualmente de manera indistinta y sin embargo no tienen nada que ver.

La American Society for Reproductive Medicine (ASMR) considera estéril a aquella pareja que no consigue un embarazo después de un año de coitos normales sin usar métodos anticonceptivos. Otras sociedades científicas como la Organización Mundial de la Salud (OMS), la Federación Internacional de Ginecología y Obstetricia (FIGO) o la Sociedad Europea de Embriología y Reproducción Humana (ESHRE) consideran que tienen que haber transcurrido al menos 24 meses de relaciones sexuales regulares con finalidad procreadora.

Mientras que, según la ESHRE, la  infertilidad es la imposibilidad de llevar a término un embarazo. Hace unos años se hablaba de infertilidad tras tres o más pérdidas reproductivas, hoy en día, a fin de evitar un mayor sufrimiento a la pérdida de un embarazo se inicia el estudio de la pareja y tratamientos cuando se han producido dos pérdidas gestacionales.

En el caso de la infertilidad se pueden hacer dos distinciones. Por un lado, la infertilidad primaria cuando nunca se ha conseguido un embarazo a término y por otro, la secundaria que tiene lugar cuando tras una gestación normal se producen abortos.

Una vez que ya hemos aclarado la diferencia entre estos términos, resulta interesante comentar algunos datos curiosos a través de esta infografía que he preparado para vosotros con mucha ilusión.

Infografía Reproducción humana

Victoria