4 de junio se celebra el Día Mundial de la Fertilidad, que se engloba en el mes de junio, al cual se le llama mes del Cuidado de la Fertilidad. Es fundamental la información, la concienciación, una mayor inversión en investigación y el apoyo gubernamental para que los recursos lleguen a todas las personas dándoles la oportunidad de llevar a cabo su proyecto reproductivo.
Además, se pretende dar una cierta “normalidad” a la esterilidad/ infertilidad definida por la Organización Mundial de la Salud (OMS), como «una enfermedad del aparato reproductor definida por la imposibilidad de lograr un embarazo clínico después de 12 meses o más de relaciones sexuales sin protección regular». Y, por último, dar mayor visibilidad de esta realidad a la sociedad para que las personas que la padecen no se sientan estigmatizadas.
Se estima que en el mundo 1 de cada 6 personas padece infertilidad. La incidencia de la infertilidad va en aumento con cifras que varían entre el 15% y el 20% respecto a la población general y los datos obtenidos muestran una distribución de las causas que son de origen masculino: 30%; femenino: 30%, ambos miembros de la pareja: 30%, y un 10% de causa desconocida.
En un gran número de casos podrían ver solucionado su deseo reproductivo si accedieran, o tuviesen acceso, a los tratamientos de fertilidad en centros públicos y privados. Sin embargo, se enfrentan a una serie de cuestiones que son globales: ¿Cómo es la percepción de la infertilidad en todo el mundo, en su mundo? ¿Qué pasa con aquellos que no pueden acceder a los tratamientos? ¿Cómo afecta la diferencia cultural, religiosa, orientación sexual, estatus económico respecto a la infertilidad?
Considero que esta campaña no debería poner el foco sólo en la mujer, centrando únicamente la atención sobre su proyecto reproductivo, sino también debería incluir al varón, ya que se trata de un proyecto de los dos. Hombres y mujeres deberían estar informados (en mi opinión desde la adolescencia, mediante charlas informativas en las aulas) sobre la importancia de la prevención (Fig.1) Así como, que la esterilidad/ infertilidad se ha de abordar de manera multidisciplinar, ya que abarca otras áreas que van a influir de manera directa sobre la fertilidad como son el estado mental, emocional, físico y social.

En conclusión, la sociedad ha de tener presente la importancia de que sus miembros cuiden la fertilidad y para ello es necesario informar a la población y seguir unas pautas saludables, como las recomendadas por diversas sociedades científicas del área:
- Realizar controles ginecológicos anuales desde el inicio de las relaciones sexuales.
- Vacunar contra la rubeola a las mujeres mayores de 15 años.
- Conocer el período de fertilidad femenina.
- Usar anticonceptivos de barrera como el preservativo para evitar enfermedades de transmisión sexual.
- Comer de forma equilibrada y realizar actividad física moderada.
- Controlar el peso.
- No fumar, consumir drogas o alcohol en exceso.
- Tener presente que la edad es un factor limitante, 35 años en mujeres y 45 años en varones.
- No posponer demasiado el tener un hijo. Quizás sea necesario reevaluar la escala de valores personales.
- Considerar el riesgo asociado a un embarazo tardío.
- Realizar consultas médicas a tiempo frente a diversos signos de alerta.
- En el caso de pacientes oncológicos preservar tejido gonadal y/o gametos (tanto óvulos como espermatozoides), antes de someterse a tratamientos de quimio o radioterapia.
En este recién iniciado “Mes Internacional del Cuidado de la Fertilidad”,tiene como objetivo el resaltar la importancia de cuidar la fertilidad, ser conscientes de los problemas de puedan aparecer y la necesidad de saber identificar el momento adecuado para consultar a un especialista. Como siempre os aconsejo poneros en manos de buenos profesionales, ellos son los que os podrán informar, estudiar vuestro caso y buscar, junto a vosotros, las mejores opciones.
Victoria