4 de junio, Día Mundial de la Fertilidad.

Se estima que en el mundo alrededor de 50 millones de parejas quieren tener hijos, pero no lo consiguen. En una gran proporción podrían ver solucionado su deseo si accedieran a los tratamientos de fertilidad. Sin embargo, se enfrentan a una serie de cuestiones que son globales: ¿Cómo es la percepción de la infertilidad en todo el mundo, en su mundo? ¿Qué pasa con aquellos que no pueden acceder a los tratamientos? ¿Cómo afecta la diferencia cultural, religiosa, orientación sexual, estatus económico respecto a la infertilidad?

Por esa razón, el 4 de Junio se celebra el Día Mundial de la Fertilidad, que se extiende a todo el mes, denominando a junio como mes de la fertilidad, con la intención de informar y concienciar sobre la importancia de cuidar la fertilidad. Con ello, además, se pretende dar una cierta “normalidad” a la infertilidad definida por la Organización Mundial de la Salud (OMS), como «una enfermedad del aparato reproductor definida por la imposibilidad de lograr un embarazo clínico después de 12 meses o más de relaciones sexuales sin protección regular». Y por úlimo, dar mayor visibilidad de esta realidad a la sociedad para que las personas que la padecen no se sientan estigmatizadas.

Considero que esta campaña no se debería restringir sólo a la mujer, centrando únicamente la atención sobre su proyecto reproductivo, sino también debería incluir al varón, ya que se trata de un proyecto de los dos. Ambos han de estar perfectamente informados sobre la importancia de la prevención y que la infertilidad se ha de abordar de manera multidisciplinar, ya que abarca otras áreas que van a influir de manera directa sobre la fertilidad como son el estado mental, emocional, físico y social.

La incidencia de la infertilidad va en aumento con cifras que varían entre el 15% y el 20% respecto a la población general y los datos obtenidos muestran una distribución de las causas que son de origen masculino: 30%; femenino: 30%, ambos miembros de la pareja: 20%, y un 20% de causa desconocida.

 

Infografía Reproducción humana
Los recientes datos en nuestro país alertan sobre el bajo número de niños nacidos y el aumento de la infertilidad en los últimos años, causada por múltiples factores como la postergación de la maternidad (ser madre por encima de los 40 años), los descenso en la calidad del semen (factor masculino), y un preocupante aumento de las enfermedades de transmisión sexual que como secuela pueden dar lugar a la esterilidad.

En conclusión, la sociedad ha de tener presente la importancia de que sus miembros cuiden la fertilidad y para ello es necesario informar a la población y seguir unas pautas saludables, como las recomendadas por diversas sociedades científicas del área:

  •  Realizar controles ginecológicos anuales desde el inicio de las relaciones sexuales.
  • Vacunar contra la rubeola a las mujeres mayores de 15 años.
  • Conocer el período de fertilidad femenina.
  • Considerar el riesgo asociado a un embarazo tardío.
  • Comer de forma equilibrada y realizar actividad física moderada.
  • Controlar el peso.
  • No fumar, consumir drogas o alcohol en exceso.
  • Realizar consultas médicas a tiempo frente a diversos signos de alerta.
  • En el caso de pacientes oncológicos preservar tejido, (tanto óvulos como espermatozoides), antes de someterse a tratamientos de quimio o radio terapia.
  • Usar anticonceptivos de barrera como el preservativo para evitar enfermedades de transmisión sexual

En este recien iniciado Mes de la Fertilidad  el objetivo es  resaltar la importancia de cuidar la fertilidad, ser conscientes de los problemas de puedan aparecer y  la necesidad de saber identificar el momento adecuado para consultar a un especialista. Como siempre os aconsejo poneros en manos de buienos profesionales, ellos son los que os podrán informar, estudiar vuestro caso  y buscar, junto a vosotros, las mejores opciones.

¡ Ánimo!

Victoria