Fragmentación embrionaria

Seguramente, si tienes curiosidad por leer esta entrada, como paciente, se debe a que, en algún momento del desarrollo de tus embriones, te han comentado que presentaban fragmentos. Y tú te has preguntado ¿Qué es un fragmento? ¿Cuánto influye esto en la calidad de mis embriones? ¿Impedirán la implantación? Te invito a que leas esta entrada, con la esperanza de aclarar todas tus dudas.

Empezaremos definiendo ¿Qué es un fragmento?

Cuando las células (blastómeros) que componen un embrión se dividen, se forman unos puentes citoplasmáticos entre ellas que al romperse dan lugar a los fragmentos. La fragmentación se define como la presencia de estructuras anucleadas (sin núcleo) de origen blastomérico, formadas por porciones de citoplasma extracelular delimitadas por una membrana celular Johanson et al. (2003)

La fragmentación es una característica común en los estadios tempranos de embriones humanos. Podemos encontrar que la fragmentación no afecte a ningún embrión, a algunos o a todos, demostrando que es un fenómeno embrión- y paciente- específico. Se considera un parámetro esencial para incluir en la evaluación de embriones en desarrollo, ya que los embriones con una fragmentación muy elevada y persistente tienen menos probabilidades de ser viables.

¿Por qué se produce la fragmentación?

La verdad, es que no existe un único factor, sino que se asocia con varios como, por ejemplo:

  • La edad materna avanzada
  • La mala calidad del óvulo y/o el espermatozoide
  • Las condiciones de cultivo inadecuadas
  • Ciclo celular anormal
  • Anomalías cromosómicas
  • El estrés oxidativo en embriones
  • Apoptosis (muerte celular)

¿Cómo influye en el desarrollo embrionario?

La presencia de fragmentación limita el desarrollo de los embriones por un lado de forma física, si son muy abundantes, impidiendo los planos de división celular, así como a la interrupción de las uniones comunicantes entre blastómeros, que interfiere con las interacciones célula-célula necesarias para la división y la compactación.

Por otro lado, la pérdida de material citoplasmático, orgánulos importantes como las mitocondrias; proteínas reguladoras y ARNm, que intervienen de forma crucial en la división celular.

¿En qué consiste la valoración de la fragmentación embrionaria?

La valoración de este parámetro se realiza tanto en día 2 (D+2) como en día 3 (D+3)

En primer lugar, es importante considerar el tamaño que permite distinguir entre un fragmento grande anucleado de una célula pequeña (nucleada). El fragmento grande puede comprometer tanto la formación del blastocisto como la tasa de implantación. Johanson et al. (2003) demostraron que las porciones de citoplasma que tenían un diámetro menor de 45 µm en D+2 y menor de 40 µm de diámetro en D+3 no contenían ADN, sugiriendo que este puede ser el límite estandarizado para definir como fragmentos a aquellos que se encuentran por debajo de estos tamaños.

Una vez diferenciado el tamaño, lo siguiente es valorar su distribución. Esta distribución puede ser dispersa o localizada. Los fragmentos distribuidos por todo el volumen del embrión, distribución dispersa, suele estar asociado a un número mayor de anomalías cromosómicas que si la distribución está localizada en un área del volumen embrionario.

El grado de fragmentación se expresa con mayor frecuencia como porcentaje del volumen citoplasmático total. Se hace necesario valorar la fragmentación realizando al menos tres observaciones del mismo embrión en diferentes planos focales. Hay que tener la visión tridimensional del embrión y del volumen que ocupa la fragmentación, no se puede valorar en un sólo plano. Gracias a mi querido compañero de profesión y amigo, Dr. Fernando Prados que tantos esfuerzos hizo para que tuviésemos esa visión espacial.

Dependiendo de cada sistema de valoración, podemos ver esquemas sencillos como el de ESHRE donde el grado relativo de fragmentación se define como leve (<10 %) moderado (10 % a 25 %) y grave (>25 %). O algo más definido como el que seguimos en los criterios ASEBIR, donde se distinguen cuatro grupos y una recomendación:

  • ≤ 10%
  • >10 – 25%
  • >25 – 35%
  • >35%
  • 50% Recomendación: estos embriones no deberían ser ni transferidos ni congelados, debido a su tasa de implantación prácticamente nula.

¿Qué aporta el Time-lapse respecto a la valoración de la fragmentación?

Actualmente, con el uso de la tecnología time-lapse (TL) se han observado fenómenos como la reabsorción de fragmentos, que podrían afectar directamente la puntuación embrionaria. Este hecho, lo he vivido en primera persona, donde en no pocas ocasiones, ya fuera el mismo embriólogo o fueran dos embriólogos diferentes los que valoraban en días distintos los embriones, no había concordancia entre los porcentajes de fragmentación, dando lugar a pensar en una disparidad de criterio. Como la llegada del TL, pudimos comprobar que no se trataba de criterios diferentes sino de un fenómeno desconocido, no visualizado hasta entonces, como es la reabsorción de fragmentos.

Se han documentado dos tipos claramente diferentes de fragmentación mediante análisis de TL en embriones humanos: fragmentación definitiva, caracterizada como fragmentos persistentes estables claramente separados de los blastómeros y pseudofragmentación, caracterizada por una aparición transitoria durante o poco tiempo después de la división celular, pero que no se detecta posteriormente durante el desarrollo embrionario.

¿Pueden implantar embriones fragmentados?

Un embrión con características óptimas, puede seguir siendo óptimo, aunque presente un 10% de fragmentación. Por otro lado, tener hasta un 25% de fragmentación no parece que comprometa la tasa de implantación del embrión.

En el caso de embriones con fragmentos de gran tamaño, la tasa de implantación y gestación se ve reducida deforma significativa que cuando se transfieren embriones con fragmentos de tamaño más pequeño. Por último, en el caso de embriones muy fragmentados no se produce la implantación.

En resumen: la fragmentación en embriones durante la FIV, dependiendo de su tamaño y distribución, así como de su porcentaje de volumen, puede comprometer el desarrollo embrionario a blastocisto, su implantación y tener consecuencias clínicas negativas

Queda un tema pendiente por desarrollar: ¿Mejora la tasa de implantación la extracción de fragmentos antes de la transferencia? Si tienes interés en que hable de ello dímelo y lo tratamos.

Si tienes alguna duda o curiosidad escríbeme a victotiainvitro@gmail.com

Te leo atentamente

Autor: Victoria

Me llamo Mª Victoria Hurtado de Mendoza Acosta, soy Embrióloga Clínica Senior acreditada por ESHRE y ASEBIR, con más de 30 años de experiencia en el mundo de la Reproducción Asistida Humana. He trabajado en la empresa privada y hospital público. Me declaro apasionada de mi profesión, miembro activo de la Asociación para el Estudio de la Biología de la Reproducción (ASEBIR). Autora y coautora de publicaciones y artículos de libros, Ponente en Congresos nacionales y extranjeros. Profesora de Master en las Univ. de Murcia, Castellón y TECH Univ. Tecnológica, comprometida con la docencia y la divulgación. Además, soy madre de dos mujeres hechas y derechas y mamá adoptiva de una gata y un perro...lo confieso, mi otra pasión son los animales (cofundadora de la Asociación Protectora de Animales ARGOS, www.argos-sevilla.org) Me gustaría ayudar a comprender mejor el mundo de la reproducción asistida, que con frecuencia es duro y complejo. Si te puedo ayudar a aclarar tus ideas o dudas, escribirme a victoriainvitro@gmail.com. ¡Te leo atentamente!

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